sábado, 2 de agosto de 2008

Te amo Perú, te odio idiosincracia

A menudo escuchamos a nuestros políticos y a sus asesores hablar acerca de la problématica peruana, pocas veces escuchamos una solución sensata.
Vivimos en un país hermoso que muchos quisieran tener y no lo aprovechamos por estar siempre en confrontación. El peruano es un ciudadano incapaz de generar un patritismo sano, nos escudamos en falsos nacionalismos cuando nos sentimos ofendidos por algún extranjero y, poco después, regresamos a la habitual actitud anti-peruana que nos caracteriza en la región. Una idiosincracia "magalymedinera" muy arraigada en la sociedad del maleteo y jaloneo.
Basta ver la política cotidiana, por un lado nos gobierna un partido que realmente se esta esmerando en sacar al Perú adelante aprovechando la conyuntura actual, sin duda con errores y aciertos, pero con una solidez que pocas veces se ve en nuestro país.
Por el otro una oposición que en vez de dar ideas, se limita aprovechar cualquier error para el "maleteo". Una opoisición que no tiene escrupulos de venderse públicamente como muy patriotas y nacionalistas, cuando por debajo de la mesa persiguen intereses de una neo república bananera y sus colonias.
Es hora de dejarnos de hipocresía y empezar a reconocer que nuestra sociedad requiere de una reforma integral, es hora que aprendamos a sentir un nacionalismo sano, que nuestra sociedad deje de magalymedinear al vecino, al compañero de trabajo, al que destaca e, inclusive, al que comete un error. Que nuestra sociedad entienda de una vez que somos un país mestizo, con una mezcla histórica e inevitable. Es hora que nuestra televisión deje de dar prioridad a temas que solo socaban el desarrollo social sano. En cualquier país sería inconcebible que se le de prioridad y entrevistas a un sujeto que estafó a un banco para pagar sus aventuras con vedettes, a un asesino y violador, que se le conceda la oportunidad de vanagloriarse a algún artista farandulero que delinque, dejando de lado a muchos peruanos que han logrado grandes obras o que llevan el nombre del Perú a otras latitudes con obras, ideas y esmero. Es hora que nuestra política entienda que dentro de poco ya no tendrán la oportunidad de llegar al poder o al Congreso por un voto ignorante. Es hora que construyamos un Peru de verdad y dejemos de lado ese conglomerado de realidades confrontacionales al que llamamos patria.
Es hora que aprovechemos nuestas cualidades creativas para hacerle llegar a nuestros políticos las ideas y propuestas de solución a los diferentes problemas que aquejan nuestro país. Olvidemos el hecho que muchos asesores ineptos llegan a los puestos por compadrazco o carnet, mostremosle al gobierno que los peruanos de a pie podemos aportar mucho más que aquellos que se dicen padres de la patria.

1 comentario:

ximenaperu dijo...

Si cada peruano pensara de igual manera volveríamos a ocupar el lugar que como legado histórico nos pertenece.
Somo grandes , tenemos todo , solo nos falta trabajar todos en una misma dirección